Misión cumplida

Saludos horusuvepalitienses, tras mi paso por la ancha Castilla he vivido todo tipo de peligros y aventuras tal como adverti, el calor, la insufrible falta de alimentos, la incomunicación completa... pero ha sido una experiencia inolvidable.

En primer lugar, los desayunos en la cafeteria "Soraya" donde los cafés cortados no llevan leche y un café solo si que lleva, donde una pulguita de tortilla se convierte en un bocadillo de 50cm y donde hacer una tostada "lleva su tiempo". Pasear por el pueblo de Cifuentes y ver como los locales te miraban cual foragido hacía surgir un sentimiento de desconcierto e incomodidad no conocidos hasta ahora, pero aun así nos adentramos por sus calles, algunas con nombres un tanto curioso.

El segundo día nos fuimos hasta un pueblo cercano, mas grande y mas conocido, "Sigüenza" el cual visitamos y pateamos de arriba a abajo, castillo y catedral incluidos. Comimos tal y como manda la estricta dieta mediterránea: cochinillo, cordero y cabrito entre otros manjares. A la noche la cena del día previo a la nupcia con mucha gente que iba llegando desde toda la península, y de nuevo, chuletas de cordero, jamón ibérico... en fin ya me siguen.

El tercer día, el día clave, el del bodorrio. Nos desplazamos con tiempo a otro pueblo cercano, "Trillo" donde habia una fiesta taurina en la cual soltaban una vaquilla que acabaría cayendo al rio creo, nunca lo vimos, tan solo gente en el río bañandose, hay que decir que justo en este pueblo hay una central nuclear, de ahí que nosotrso renunciáramos a darnos un chapuzon a pesar de estar a mas de 30 grados.

Por la tarde, y con las prisas de siempre, nos desplazamos al lugar de la boda "Torrecuadradilla" cuyos habitantes veían como su localidad crecía, multiplicándose por dos, tres y hasta por cuatro veces. En el prado se realizaba la ceremonia, sentados en bancos de paja, los novios eran transportados hasta aquí en tractor, si si en tractor. No hubo anillos, en su lugar, regaron una planta, y sonaba de fondo la canción de Star Wars: "the throne room" pero no se asusten, una versión del grupo "vitamin string quartet" muy bonita. El "si quiero" se dijo por un altavoz para que quedara clarito y sin mas se cerró la ceremonia con los abrazos y lágrimas estipulados.

Y luego que, ¿sonaba la banda de Agaete?, no era la banda de Agaete pero si la misma melodía, luego la banda tocó algunos temas de cosecha propia no excentos de atrevimiento y obscenidad. Luego las fotos de familia y al mismo tiempo empezaba el ESPAÑA-FRANCIA, el único bar del pueblo y la única tele tenían de pronto mas clientes que en todo el año y tras el primer gol de Xabi Alonso consiguieron que entraramos a la carpa para cenar.

En la cena, más sorpresas, cuadros de los novios por doquier, velas en frascos, todos ellos reciclados y bordados, había muchísimo trabajo y una filosofía de vida que da que pensar. Luego llegó la comida, de nuevo muy digna de la dieta mediterránea y también llegó el segundo gol de la Roja y los "viva los novios", "viva la madrina", algún "viva España".

Y por fin, el baile, la fiesta en si misma, de la que sobran palabras. Tan solo decir que al novio le falto un poco de rayos ultravioleta, un guante blanco y un sombrero para ser la reencarnacion del rey del pop "Michael Jackson". Al final, amanecida, guagua, tres horas de sueño, maletas, viaje de vuelta a madrid y retraso de casi cuatro horas del vuelo.

Gracias Jose y Patri. Un beso fuerte a los dos.

Un saludo horusuvepalitienses!!